Dar amor es dar color

Giovanna es una chica de 20 años, amante de los animales, sobre todo de los perros, siempre pensando en que quería salvar a los perritos de la calle y darles hogar. Trabaja casi todo el día y pensó que eso sería un impedimento por mucho tiempo para poder adoptar o tener perritos. Hasta que un día, como cualquier otro en su trabajo, llegó un perrito, y pareciera que hubo conexión de hilo rojo entre ellos dos, ya que él ya no se quería ir y ella no quería que se fuera, así que lo adoptó. Él era de pelo güero, así que ese nombre se ganó “Wero” , no le gustaba estar encerrado así que aprendió a entrar y salir del negocio y también se aprendió el camino para llegar a casa de Giovanna. Y así fue como empezó una bonita historia de adopción, solo con un “me lo quiero quedar” y una respuesta notoria de él, que a pesar de salir y pasear, siempre regresa a su hogar.